Aunque alquilar un inmueble es una práctica muy común, dar el paso por primera vez puede asustar un poco. Al fin y al cabo, estás abriendo las puertas de tu propiedad a terceras personas y es normal que te asalten las dudas.
¿El piso estará bien cuidado? ¿Cobraré el alquiler cada mes? ¿Qué debería incluir en el contrato? ¿Cuáles son mis obligaciones? ¿Y mis derechos?
La mala noticia es que, efectivamente, no puedes alquilar a lo loco. Hay muchas cosas a gestionar y vale la pena hacerlo con atención para evitar dolores de cabeza.
La buena es que desde GDH Properties te lo ponemos fácil y nos encargamos de las tres cuestiones principales que te asegurarán un alquiler tranquilo y sin disgustos de última hora.
Por eso es tan importante despersonalizar tu vivienda si estás pensando en venderla. Porque facilitas esa fantasía en la cabeza de tu posible comprador.
Los objetos muy personales como las fotos de familia, los souvenirs o las manualidades de tus hijos dificultan ese ejercicio y van en tu contra. Van en contra de la venta.
¿Las repasamos?
1. Atraer solo a inquilinos potenciales
Organizar las visitas puede ser engorroso. Hay que encontrar una fecha que funcione para todas las partes implicadas, ordenar el espacio y repetir el proceso una y otra vez hasta que se alquile el inmueble.
Para que este trámite te sea más ameno, creamos tours virtuales del espacio para que todas tus visitas lleguen con una idea clara de cómo es el piso.
Esto hace que suba el porcentaje de visitas que acaban en alquiler y que puedas empezar a sacar rentabilidad a tu inmueble de manera rápida y sin perder el tiempo.
¿Quién quiere abrirle la puerta a alguien que solo viene a curiosear sin ningún interés real en alquilar el piso?
2. Elegir al arrendatario ideal
Queremos que viváis juntos una relación de amor: sana, tranquila y a largo plazo. Por eso nos entrevistamos con los candidatos y buscamos el match perfecto para ti.
3. Gestionar el seguro para arrendadores
Contratar un seguro de alquiler te protege frente a posibles impagos, desperfectos y accidentes que puedan darse mientras tu inmueble está alquilado. Es la solución perfecta para estar cubierto ante cualquier cosa que pueda pasar.
Pero elegir el que más te conviene puede añadir complejidad a todo el proceso de alquiler.
Por eso trabajamos directamente con las aseguradoras para gestionar todo el papeleo.
También te asesoramos y resolvemos cualquier duda que tengas para que puedas elegir con la tranquilidad de estar optando por el seguro que más te conviene en función de tu caso y necesidades.
Así puedes cerrar el contrato de alquiler sabiendo que todo va a salir bien, pase lo que pase. Así puedes alquilar con todas las garantías.